Si ustedes creen que han visto o vivido en oscuridad al caer la noche tienen que visitar la Zona Sur de Acevedo. Después de las seis de la tarde esta es tal que se puede abrir una ventan al cortarla con un bisturí y al otro lado solo encontraras lo mismo. Más oscuridad.
Y es que por todos los años que tienen asentadas estas comunidades en las montañas de Guatopo la única luz que han recibido o conocido sus habitantes del debido a las difíciles condiciones geográficas de sus regiones, no a sido mas que la candente sol de día o la de las lunas llenas y las estrellas por las noches o los que trasmiten los pocos motores a gasoil y gasolina con su particular estruendo y dosis contaminante, para alumbrar unos cuantos bombillos de un solo hogar.
Pero algo ha empezado a cambiar. A raíz de la conformación de los consejos comunales en estas zonas rurales sus habitantes organizados han recibidos recursos, capacitación y financiamientos para que en conjunto, comunidad e institución puedan competir con la oscuridad en cambiar la rutina nocturna de estas comunidades. Desde Pele el Ojo hasta la Marinera, pasando por los caseríos de Buena Vista y Quebrada Seca y otros aledaños se empiezan a ver los trabajos de tendidos de poste que anuncia la tan protestada luz para estos sectores. De hecho algunos de estos caseríos ya disfrutan de ella.
Pero hay otro hecho mas sabroso e interesante y es que en aquellos lugares donde aun no llega ni a lo mejor llegaran estos proyectos una forma de energía mas limpia e innovadora esta cobrando fuerza rápidamente para el beneficio y curiosidad de sus habitantes y son los paneles solares. Actualmente más de ocho escuelas y varios ambulatorios médicos se benefician de las instalaciones de este tipo de energía, de paneles solares o sistemas fotovoltaicos (SFV), provenientes del convenio Cuba-Venezuela que en un principio se concentraran por atender prioritariamente la salud y educación.
Las escuelas de las comunidades de Casupito, Palmira, Macanilla, el Jobito, el Filon, Pueblo Nuevo y San Rafael de Vega Larga mas varios ambulatorios cuentan hoy en día con sendas instalaciones no solo para luz sino que plantas potabilizadoras de agua han sido instaladas en algunas de ellas alimentadas de energía con dichos paneles.
la Fundación para el Desarrollo del Servicio Eléctrico (Fundelec), adscrita a Petróleos de Venezuela (Pdvsa) junto con la gestión y apoyo del alcalde Juan Aponte y el equipo de transporte de la Cooperativa Cafecao han hecho posible que a las intrincadas montañas de la zona sur, por lo menos para empezar, sus escuelas y ambulatorios tengan luz.
De acuerdo con el director ejecutivo de Fundelec, Rafael Salazar, los sistemas fotovoltaicos que adquiere Venezuela en Cuba a la mitad de los precios del mercado son colocados en comunidades fronterizas y aisladas para alimentar, en orden de prioridad, ambulatorios de Barrio Adentro, escuelas y comedores, plantas potabilizadoras de agua y sistemas de comunicación satelital.
Y es que por todos los años que tienen asentadas estas comunidades en las montañas de Guatopo la única luz que han recibido o conocido sus habitantes del debido a las difíciles condiciones geográficas de sus regiones, no a sido mas que la candente sol de día o la de las lunas llenas y las estrellas por las noches o los que trasmiten los pocos motores a gasoil y gasolina con su particular estruendo y dosis contaminante, para alumbrar unos cuantos bombillos de un solo hogar.
Pero algo ha empezado a cambiar. A raíz de la conformación de los consejos comunales en estas zonas rurales sus habitantes organizados han recibidos recursos, capacitación y financiamientos para que en conjunto, comunidad e institución puedan competir con la oscuridad en cambiar la rutina nocturna de estas comunidades. Desde Pele el Ojo hasta la Marinera, pasando por los caseríos de Buena Vista y Quebrada Seca y otros aledaños se empiezan a ver los trabajos de tendidos de poste que anuncia la tan protestada luz para estos sectores. De hecho algunos de estos caseríos ya disfrutan de ella.
Pero hay otro hecho mas sabroso e interesante y es que en aquellos lugares donde aun no llega ni a lo mejor llegaran estos proyectos una forma de energía mas limpia e innovadora esta cobrando fuerza rápidamente para el beneficio y curiosidad de sus habitantes y son los paneles solares. Actualmente más de ocho escuelas y varios ambulatorios médicos se benefician de las instalaciones de este tipo de energía, de paneles solares o sistemas fotovoltaicos (SFV), provenientes del convenio Cuba-Venezuela que en un principio se concentraran por atender prioritariamente la salud y educación.
Las escuelas de las comunidades de Casupito, Palmira, Macanilla, el Jobito, el Filon, Pueblo Nuevo y San Rafael de Vega Larga mas varios ambulatorios cuentan hoy en día con sendas instalaciones no solo para luz sino que plantas potabilizadoras de agua han sido instaladas en algunas de ellas alimentadas de energía con dichos paneles.
la Fundación para el Desarrollo del Servicio Eléctrico (Fundelec), adscrita a Petróleos de Venezuela (Pdvsa) junto con la gestión y apoyo del alcalde Juan Aponte y el equipo de transporte de la Cooperativa Cafecao han hecho posible que a las intrincadas montañas de la zona sur, por lo menos para empezar, sus escuelas y ambulatorios tengan luz.
De acuerdo con el director ejecutivo de Fundelec, Rafael Salazar, los sistemas fotovoltaicos que adquiere Venezuela en Cuba a la mitad de los precios del mercado son colocados en comunidades fronterizas y aisladas para alimentar, en orden de prioridad, ambulatorios de Barrio Adentro, escuelas y comedores, plantas potabilizadoras de agua y sistemas de comunicación satelital.
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